El metro de Moscú es un auténtico museo. Cada estación, cada andén, cada pasarela, columna y techo es una obra de arte. Con deciros que se conoce como "El Palacio Subterráneo"...
Fue inaugurado en 1935 y es el tercero más grande del mundo después de Londres y Nueva York, aunque el primero del mundo en densidad de pasajeros. Por eso los pasillos están perfectamente organizados y si vas en una dirección debes ponerte a la derecha y si vas en otra a la izquierda. Si, como turista, necesitas unos diez minutos para leer el nombre de la línea o de la parada, mejor apártate :) Por cierto, con 12 líneas y 182 estaciones y todo escrito en cirílico (solamente) es como un jeroglífico; parte de la diversión de estar en Rusia!
Lo que no imaginamos es cómo lo hacen cuando se estropean las escaleras mecánicas... :P
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