Cuando llegamos del aeropuerto la primera cosa que hicimos fue coger el tren hasta el centro de la ciudad. Como era de esperar, modernísimo, rapidísimo, comodísimo y todo lo que os podáis imaginar para los patrones escandinavos. Cuando entramos en el vagón, nosotros tres y otros recién llegados, una mujer que leía levantó la mirada del libro y me pareció oír un "shhhhh" pero fue tan discreto que me dije "no, no ha hecho eso, ha sido mi imaginación, principalmente porque nadie ha hablado y el ruido ha sido mínimo". Al cabo de un rato, la mujer se levantó y fue hacia una pareja de turistas que hablaban susurrando y les hizo "shhhhhhhh, excuse me, this is a silent coupe", como si fueran niños. Nosotros no entendíamos nada: coño, que es un tren y no una biblioteca, pensamos. Pero al salir nos fijamos en el pequeño detalle de la puerta, que tenéis fotografiado aquí... Ya veis el nivel de la peña: vagón silencioso para poder leer cuando viajas!!!
Assinar:
Postar comentários (Atom)
Nenhum comentário:
Postar um comentário