Este es el misterioso e inquietante mundo subterráneo que esconde y ha escondido durante muchos años el suelo de esta ciudad. Desde refugios antiaéreos durante la segunda guerra mundial y aprovechando las instalaciones de metro, hasta el espionaje durante la Guerra Fría.
En la estacion Gesundbrunnen se hace una vez por semana una visita guiada por algunos de los precarios refugios que se construyeron sin prever la duración y crueldad de la guerra. No son búnkers porque no están tan bien protegidos. Se encuentran a entre 2 y 4 metros de profundidad (si una bomba cae encima muere todo el mundo) y sus paredes solo tienen un grosor de 60 cm., cuando las del búnker del Führer medían 4 metros por los seis costados. Además, las estancias que se habían construido para refugiar durante apenas unos minutos de bombardeo a 20 personas, acabaron cobijando a más de 80, con lo que cada persona contaba con un metro cúbico de aire. Por supuesto que, al cabo de una hora, la supervivencia allá bajo empezaba a ser casi tan dura como la de arriba.
2 comentários:
Al finla lo vistesis, no os impresionó mucho??? es aterrador.
muy buen post.
un beso!!
blavasqui
pues sí, pero en esta ciudad es todo así.....la historia está en cualquier esquina, y encima todo DOCUMENTADO!!
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