Como en cualquier zoco, por estas calles laberínticas puede verse un ajetreo cotidiano curiosamente mucho más local y menos turístico que en otras regiones. A diferencia, sin embargo, de otras regiones más turísticas, hay más referencias a la revolución, por ejemplo esta pintada del joven Mohamed Bouazizi, que desesperado porque la policía le quitó su parada ambulante de fruta, su único medio de subsistencia, se inmoló iniciando así una revolución que acabaría derrocando al dictador Ben Ali. Bueno "acabar" no sería la palabra, porque el proceso que ha abierto la revolución todavía no ha acabado. Veremos en qué desemboca...
segunda-feira, 6 de agosto de 2012
Assinar:
Postar comentários (Atom)
Nenhum comentário:
Postar um comentário